La atención de los expertos en SEO se está centrando en los últimos tiempos en la aportación que puede tener la semántica a la hora de posicionar una web. Aparte de tener en cuenta los aspectos tradicionales de construir una imagen de marca, aumentar la visibilidad de la web y conseguir fidelizar a los visitantes, la verdad es que organizar una estrategia basada en la semántica del SEO es una prioridad en la actualidad. Para conseguirlo, es necesario tomar en cuenta cinco puntos fundamentales.
Antes que nada, es esencial plantearse qué es realmente la semántica del SEO. Expertos como la Agencia Flexia la definen como una búsqueda que produce diversos resultados con significado, aunque estos no tengan ninguno de los términos requeridos, o un texto en sí mismo. A lo largo del último año, los buscadores están inclinándose cada vez más a este tipo de búsquedas.
Este tipo de búsquedas relacionadas con la semántica no tienen por qué significar que el uso de las palabras clave o keyword ya no tiene sentido. Al revés, estas palabras siguen siendo claves a la hora de plantear la búsqueda y encajar resultados relevantes. Eso sí, hay signos de que las cosas están cambiando, como el lanzamiento de la ‘búsqueda conversacional’ por parte de Google, que se basa en el objeto de la búsqueda, las características del usuario y donde busca.
Asimismo, el marcado de información estructurada también afecta el SEO. Los grandes buscadores como Google pueden mostrar claras señales de este marcado, usado como uno de los factores de posicionamiento. Muchos expertos en SEO se plantean su validez a la hora del posicionamiento, pero hay que tener siempre presente que el objetivo final debe ser conseguir una web equilibrada, en la que se tengan en cuenta el usuario, el motor de búsqueda empleado y el contenido publicado.
Albert Pastor.
Director de TecnicasMarketing.com